Maestrante 3°versión Maestría en sociolingüística PROEIB Andes.
Buenas tardes, quiero presentarles mi proyecto de investigación que estoy haciendo para la maestría en sociolingüística, tiene el título: “Memoria y olvido de la lengua Paunaca en una familia Chiquitana”. Estoy muy agradecido de escuchar todas las charlas de este seminario que me ayudarán para escribir la tesis, sobre todo lo que ahora he escuchado de Elsa del Valle, porque la situación del Paunaca es muy similar a la del Náhuatl. El Paunaca es una lengua que se habla en la Chiquitanía, son los chiquitanos que la hablan, sin embargo el Náhuatl es una lengua que se habla en la ciudad y el Paunaca se habla en el campo.
El título viene porque hoy no se habla de manera cotidiana el idioma Paunaca, pero hay personas que saben hablar el idioma. Entonces esa dialéctica se da entre personas que se acuerdan pero que no lo hablan y otros que dicen no hablarlo pero que lo hablan cuando están con algunos tragos.
Quiero decir algunas cosas del territorio porque aquí se ha dicho en el Seminario de la conexión del territorio con la lengua. Desde una perspectiva histórica, entre los chiquitanos ha existido una dispersión y concentración de la población, teniendo en cuenta que los chiquitanos pertenecieron a las reducciones jesuíticas desde el siglo XVII y los jesuitas frente a la mayoría de población indígena chiquitana usaron como lengua franca lo que hoy conocemos como el Bésiro y los otros idiomas que eran muchos se usaban en el ambiente familiar.
Decía que hubo en aquel tiempo una concentración de la población en las reducciones y luego una época de dispersión de la población por el auge de la goma que empadronó a la gente en estado de esclavitud y esa dinámica de concentración y dispersión tiene que ver también con el idioma, pues cuando fueron concentrados se usó una lengua general y las otras para el ámbito familiar y en la época de dispersión algunas familias de estos territorios (aún no existía la denominación Chiquitana) conservaron sus lenguas porque estuvieron alejadas de estas explotaciones o bien se escaparon a lugares menos accesibles.
En la época contemporánea en la década de 1990 con las demandas de tierra y dignidad consiguieron la titulación de territorios. Así los Paunaca están ubicados en la comunidad de Santa Rita, que consiguió titularizar la TCO (Tierra Comunitaria de Origen) Monte Verde. Con respecto a la situación sociolingüística, el Paunaca es una lengua minoritaria dentro de la familia Chiquitana, y solo se consideró el idioma Bésiro como lengua general. Hoy solo este idioma que está reconocido en la Constitución Política del Estado y no así el Paunaca. Bueno es un poco difícil encontrar a las personas que hablan o recuerdan el idioma Paunaca, en la actualidad son unas 11 personas aproximadamente, 3 viven en Concepción (Departamento de Santa Cruz de la Sierra), 1 en Manacaté, 2 en San Miguelito de la Cruz, 4 en Santa Rita y 1 en Santa Cruz.
Quería contarles una anécdota del trabajo de campo que realicé en Junio (2018). Fuimos al chaco de un comunero, hablante del Paunaca y estábamos cosechando maíz. En eso se apareció una víbora y por supuesto me asusté y le hablo al hermano. La víbora se escapa y nos pusimos a buscarla, puesto que podría ser venenosa. Luego cuando la encontramos, yo estaba con el machete y no sabía muy bien qué hacer. El hermano reconoció que no era una víbora venenosa, tomó un palo de una hoja de motacú, la alzó y le habló a la víbora pero no le habló en Paunaca sino en español y le dijo qué hacía acá, qué hacía en el chaco, que su lugar era el monte.
Lo anterior viene a propósito de lo que acá se ha hablado acerca de la pérdida de la lengua. Pues si bien se deja de hablar una lengua me parece que la cultura se sigue manteniendo, es decir la relación con la naturaleza aún se mantiene. Lo mismo para el caso Chiquitano, pues si bien han dejado de hablar su idioma como el Paunaca como el Napeca y otros idiomas que se hablaban en la Chiquitanía, todavía creo que siguen manteniendo su cultura, pues no han dejado esas prácticas culturales.
Gracias.